domingo, 30 de enero de 2011

I love Unicorn Museum

Si como lo oís. El museo del unicornio. Y ¿por qué un museo para los unicornios? Porque aparece en la biblia y entonces son reales.

Además ya han decidido donde colocarlo. Justo al lado del Creation Museum.

Alguno a estas alturas ya estará jurando en hebreo y quizá en arameo también. Pero no es para tanto. Esto del museo del unicornio es una manera de protestar. ¿Cómo? Pues con el mismo razonamiento con el que han montado el museo de la creación, si aparece en la biblia es real.

Simplemente os quería informar de este movimiento.

Podéis visitar estas webs dónde enteraros de que va el tema:



Creation Museum: De esta no ponlo link, quien quiera que lo busque.

Gracias Ome por la info.

miércoles, 26 de enero de 2011

Perdidos en el levigado

Haz clic en la foto para leer la entrevista
Estamos de enhorabuena de nuevo. La semana pasada un compañero nuestro publicó un estudio sobre histología en saurópodos. Ahora otros investigadores (creo que mejor llamarlos amigos) han definido en la revista Createous Research un nuevo mamífero en Teruel. Ainara Badiola, junto a Gloria Cuenca e Iñaki Canudo han descrito un nuevo género y especie de multituberculado : Iberica hahni. Este nuevo mamífero dedicado a la Península Ibérica y a Gerhard y Renate Hahn, paleontólogos que han trabajado con los multituberculados en algunos yacimientos de Teruel, y Cuenca, amplia la diversidad de los mamíferos en la época de los dinosaurios. 

Además de estar muy contento porque tengo mucho aprecio a los autores del artículo, me lo tomo como un éxito de "el otro trabajo" de campo. Todos nos imaginamos a los paleontólogos excavando en el mesozoico con martillo y cincel, haciendo momias sobre huesos de dinosaurios gigantes. Pero hay otro tipo de trabajo, menos expectacular en el método, pero en ocasiones más expectacular en el resultado. Me refiero claro está, al estudio de los microfósiles. Este artículo es uno de sus  frutos. Son muchas las horas lavando material, secándolo, triándolo, clasificándolo, ... Y este es mi pequeño homenaje a aquellos que trabajan con estos fósiles, ya sea dientes, cáscaras de huevos, carofitas, polen,...

Los dientes de Iberica
Y como pasó la semana pasada, he vuelto a abusar de uno de los autores del artículo para hacerle unas preguntas generales para que hasta los más profanos en la material, puedan entender la importancia del hallazgo. En este caso le ha tocado a Ainara Badiola, paleontóloga del Grupo Aragosaurus y profe de la Universidad del País Vasco. Además, como imagen os adjunto una entrevista que le han hecho para el periódico Berria (en Euskera).

¡A este ritmo en vez de Dinópolis habrá que llamarlo Mamiferópolis!



¿Cómo eran los mamíferos en el Cretácico Inferior?
En el Cretácico Inferior había una gran diversidad de mamíferos y formas afínes o mammaliaformes; éstos últimos son aquellos que no se incluyen dentro de los tres grupos principales de mamíferos que conocemos en el Cenozoico o en la actualidad: Eutheria (los placentados), Metatheria (los marsupiales) y Australosphenida (monotremas). Aunque sabemos que la desaparición de los grandes reptiles en la crisis biológica del K/T trajo la diversificación y expansión de los mamíferos en el Cenozoico, a principios del Eoceno (hace 55 Ma), gran parte de la historia de los mamíferos ha transcurrido durante el Mesozoico, de la que sabemos bastante menos que la de los primates u otro grupo de mamífero del Neógeno.

En los ecosistemas terrestres de la edad de los dinosaurios también existía un pequeño mundo de mamíferos y formas afínes. Los representantes más antiguos de eutherios son del Cretácico Inferior, aunque eran mucho menos abundantes entonces. Entre las formas afínes o mammaliaformes había una gran variedad de grupos, entre los que se encuentran, por ejemplo, los Morgacunodontidos, Docodontos, Kuehneodontidos, Haramyidos, Dryolestoideos, etc, tal y como podemos comprobar en el libro “Mammals from the Age of Dinosaurs” de los autores Zofia Kielan-Jaworowska, Richard L. Cifelli y Zhe-Xi Luo del 2004.

Siempre se ha dicho que los mamíferos del Mesozoico eran unos animales muy pequeños, como una musaraña, nocturnos y que vivían a la sombra de los dinosaurios. En parte es verdad, pero los fósiles encontrados y las investigaciones realizadas en los últimos 30-40 años indican que podrían alcanzar tamaños más grandes, como un perro Pitbull, o que su dieta era amplia –hasta se comían pequeños dinosaurios como Psittacosaurus, como es el caso del mamífero Repenomamus giganticus– y que ocupaban más nichos ecológicos de los que se creía. Había especies que colonizaron medios acuáticos y aéreos (planeadores) como las especies actuales. Uno de los grupos de mamíferos más abundantes de la Edad de los Dinosaurios fueron los multituberculados.

¿Qué es un multituberculado? ¿cómo vivían? ¿Qué comían?

Los multituberculados eran un grupo de mamíferos herbívoros, aunque se desconoce cuál sería su dieta precisa. Fueron abundantes en el Cretácico, sobreviviendo algunos la crisis biológica del K/T y, aunque menos abundantes en número y diversidad, existieron durante buena parte del Paleógeno. Se extinguieron a principios del Oligoceno (hace 35 Ma). Su dentición estaba caracterizada, principalmente, por presentar premolares y molares superiores provistas de varias cúspides o tubérculos (de ahí el nombre que se les da a estos mamíferos), y premolares inferiores triangulares o rectangulares de forma serrada en el ápice. Los elementos craneales, sobre todo la mandíbula, nos recuerdan a la de los roedores –aunque se trata de un grupo de mamíferos distinto– con la presencia de largos incisivos, seguidos de un diastema dental (parte de la dentadura que no tiene dientes). Posiblemente ocuparían nichos ecológicos similares. Su desaparición, para algunos, está relacionado con la llegada e incremento de diversidad de los roedores en el Eoceno.

¿Qué tienen de especial los dientes como para que se puedan definir nuevos taxones?

Los elementos craneales, sobre todo los dientes, son los más importante del esqueleto de un mamífero para las identificaciones taxonómicas. A diferencia que en los reptiles, la dentición de los mamíferos es heterodonta, formada por diferentes dientes anteriores y posteriores en la serie dentaria, según su función: los incisivos (para cortar), caninos (sujetar o desgarrar), premolares y molares (moler y aplastar). Existe una amplia variedad de morfologías de estos dientes y una diferenciación numérica en la serie dentaria que nos permiten diferenciar distintos grupos de mamíferos y realizar determinaciones hasta nivel de especie. Además, en función de la altura de la corona y la morfología de la superficie masticatoria –también llamada la superficie oclusal– se distinguen diferentes tipos de dientes y nos dan una idea general de su régimen alimenticio (hervíboro, insectívoro, carnívoro, omnívoros). Además la dentición de mamíferos es difiodonta, con dos generaciones de dientes (de leche y permanentes), lo que nos permite conocer el tamaño y forma de los dientes a lo largo de su vida.

Parece que Galve (Teruel) es un lugar privilegiado para sus estudios ¿se siguen encontrando restos de micromamíferos nuevos en la zona?

Galve es conocida popularmente por el descubrimiento de dinosaurios, de los cuales se han descrito dos hasta el momento: los saurópodos Aragosaurus y Galvesaurus. Sin embargo, tanto o más importantes son también, científicamente hablando, los descubrimientos de los pequeños mamíferos del Cretácico Inferior de esta localidad y de otras de Teruel. El multituberculado Iberica hahni que hemos descrito esta vez ha sido hallado en Galve y en La Cantalera, en Josa. En este último yacimiento, en 2008 se dio a conocer en otra revista inglesa, Palaeontology, otro nuevo taxón de multituberculado, Cantalera abadi. Los fósiles de Galve fueron recuperados en los años 1960 y 1970 por los equipos de investigación de los Drs. Walter Kühne y Miquel Crusafont de las Universidades Freie Universität Berlin y de Barcelona, respectivamente. La colección fósil de multituberculados de Josa, en cambio, fue recuperada a finales de la década de los 1990 por Aragosaurus (http://www.aragosaurus.com). Este equipo de la Universidad de Zaragoza lleva 20 años trabajando en la búsqueda y estudio de mamíferos y otros vertebrados del Mesozoico en todo Aragón. Fruto del trabajo de campo y laboratorio realizado durante todos estos años, ha sido la obtención de una colección importante de fósiles de mamíferos, entre otros vertebrados, de varios yacimientos aragoneses, que aún no están estudiados en detalle. Su estudio está en curso. En breve conoceremos, por ejemplo, otro nuevo mamífero de Galve, esta vez del grupo de los dryolestidos, descrito en un trabajo liderado por la Dra. Gloria Cuenca Bescós, que está aceptado para su publicación en la revista Acta Paleontologica Polonica.

Referencias del trabajo y otros trabajos recientes sobre mamíferos del   Mesozoico de Aragón:

-Badiola, A., Canudo, J. I., Cuenca-Bescós, G. (2011). A systematic reassessment of Early Cretaceous multituberculates from Galve (Teruel, Spain). Cretaceous Research, 32, 45-57.

-Badiola, A., Canudo, J. I., Cuenca-Bescós, G. (2008). New  multituberculate mammals from the Hauterivian/Barremian transition of Europe (Iberian Peninsula). Palaeontology 51, 1455e1469 [Corrigendum: Palaeontology 52, 271].

-Badiola, A., Canudo, J. I., Cuenca-Bescós, G. (2009). Plagiaulacida multituberculates from the late Barremian-early Aptian of Teruel (Spain). Tenth International Symposium on Mesozoic terrestrial ecosystems and biota, Teruel, Spain, pp. 156-157.
 
-Canudo, J. I., Gasca, J. M., Aurell, M., Badiola, A., Blain, H.-A., Cruzado-Caballero, P., Gómez-Fernández, D., Moreno-Azanza, M., Parrilla, J., Rabal-Garcés, R., Ruiz-Omeñaca, J. I. (2010). La Cantalera: an exceptional window onto the vertebrate biodiversity of the Hauterivian-Barremian transition in the Iberian Peninsula. Journal of Iberian Geology, 36 (2) 2010: 205-224.

-Cuenca-Bescós, G., Badiola, A., Canudo, J. I., Gasca, J. M., Moreno-Azanza, M. (In Press). New dryolestidan mammal from the Hauterivian – Barremian transition of the Iberian Peninsula. Acta Palaeontologica Polonica, doi:10.4202/app2009.0157.

Para terminar la noticia, copiaré al gran cómico Chiquito de la Calzada:
- Mammal, mammal, que en el colegio me llaman peludo.
- ¡¡¡Pepe, ven que el multituberculado habla!!!

sábado, 22 de enero de 2011

El tren de la Dino-bruja

En nuestra memoria, como si de sedimentos se trataran, se conservan nuestros recuerdos. Cuanto más abajo miremos, más antiguos son. Y si conseguimos hacer un sondeo que llegue a la década de los 80, en nuestras retinas como  hologramas, seguro que aparecen las atracciones de feria. Yo recuerdo con anhelo a los autos de choque, el conejito feliz, el pulpo, las tómbolas, y como no, el tren de la bruja. Esta última atracción se caracterizaba por una especie de monorrail (como el de North Haverbrook), que daba vueltas de manera antihoraria (desconozco si es por coriolis porque en Argentina no lo llegue a ver) y un señor disfrazado de bruja que te agredía con una escoba sin parar.

En una época como la actual, este tipo de ferias lo tienen muy complicado. Ya los zagales no se acercan a dejar sus monedas y quien sabe, igual ligar con las mozalbetas. Prefieren quedarse en casa con las consolas, el ordenador y conocer gente en el facebook. 

Os preguntaréis a que viene todo esto, pues no lo se ni yo mismo. Sólo me apetecía escribir. Dejar que los dedos tecleen las letras oportunas para introduciros en el nuevo y fabuloso mundo de los trenes de la bruja 2.0. 

Ya en vuestra ciudad, EL NUEVO, DIFERENTE, MESOZOICO, SAURIANO,  DE GIRO HORARIO Y MÁS, TREN DE LA DINO-BRUJA.

Para los que se pregunten cual es la diferencia entre el antiguo y el nuevo, sólo apuntar que es más vintage, y ligeramente kitsch. Lo que os aseguro es que no había nadie disfrazado de dinosaurio fustigando al personal.


Fotografía tomada durante las navidades en el paseo de la Canilla en Portugalete.

miércoles, 19 de enero de 2011

Mirando dentro de los huesos

Cómo se puede leer en la Web y el Blog de Aragosaurus, acaba de salir un trabajo en la revista Naturwissenschaften del paleontólogo Julio Company sobre la histología del dinosaurio saurópodo Lirainosaurus astibae. Este dinosaurio, encontrado en Laño y dedicado al catedrático de paleontología Humberto Astibia, tiene un porte inferior respecto a otros saurópodos. Últimamente se han publicado trabajos que tratan sobre la posibilidad de que hubiera dinosaurios enanos debido a la insularidad (un tipo de especiación alopátrida), como ha ocurrido con otro tipo de animales (la cabra Myotragus balearicus en Mallorca y Menorca por ejemplo).

Con el fin de saber más sobre el crecimiento de estos saurópodos, el Dr. Company ha estudiado la histología de los huesos de Lirainosaurus procedentes del  yacimiento de Chera en Valencia. Después de leer el artículo, y abusando de la amabilidad de Julio, le he hecho unas preguntas sobre su estudio, que comparto con vosotros. 

¿Para qué se usan los análisis histológicos en huesos de dinosaurio?
El estudio de la paleohistologia de restos óseos permite por ejemplo conocer el estado ontogenético de un ejemplar de vertebrado fósil. De esta forma, por ejemplo, podremos determinar si restos de pequeño tamaño pertenecen a individuos juveniles o corresponden a adultos de pequeño tamaño. De esta manera se evita la creación de nuevos taxones que resultarían ser sinónimos  de géneros y especies ya definidos. También se puede incluso determinar el numero de años que vivió el dinosaurio, si sus huesos presentan anillos de crecimiento. En algunos casos incluso se puede determinar el sexo del individuo,  por ejemplo si se tiene la fortuna de muestrear huesos largos de hembras en estado que temporalmente depositan tejido  medular en las cavidades medulares de los mencionados elementos  esqueléticos. También se pueden determinar los ritmos de crecimiento en organismos extintos, es decir, si experimentaban un desarrollo corporal constante y continuo (sin interrupciones, como los humanos o mamíferos actuales en general) o crecían de forma periódica, con  fases alternantes de reactivación y detención de crecimiento (como los reptiles o los mamíferos que hibernan). Algunos autores piensan que es posible hacer deducciones metabólicas a partir del tipo de tejido oseo hallado (de alta o baja velocidad de crecimiento). También se pueden hacer inferencias filogenéticas Se según el tipo de caracterización histológica observada en los huesos analizados (según se observen patrones histológicos mas primitivos o mas derivados), etc...
Entonces ¿tienen crecimiento continuo los saurópodos hasta que mueren?
En general sí, como Apatosurus y otros saurópodos similares, pero hay  saurpodos de pequeño tamaño (Europasaurus, Lirainosaurus, tal vez  Magyarosaurus) y algunos prosauropodos, que presentan crecimiento  interrumpido (periódico, con periodos de detención del  crecimiento).
Si no he entendimo mal, pueden estar un tiempo sin crecer, por ejemplo por una hambruna, y luego seguir como si tal cosa.
Si, Lirainosaurus es un ejemplo claro. Es fácil ver los anillos de crecimiento que marcan esas interrupciones en el crecimiento. Europasaurus, un pequeño saurópodo del Jurásico de centroeuropa es otro ejemplo.
¿Es Lirainosaurus un dinosaurio enano?
No del todo, tiene unas dimensiones ciertamnete reducida, mucho menores que los grandes saurópodos como Giraffatitan, Apatosaurus, etc. Pero sería un dinosaurio grande en comparación con otros saurópodos enanos, como Magyarosaurus, del que se han hallado fémures de individuos adultos de menos de 50 centímetros de longitud. Ten en cuenta que un fémur de Lirainosaurus adulto se acerca a los 90 centímetros. Eso sí, parece ser que eran saurópodos muy gráciles, de pocas toneladas de peso. 
 ¿Se sabe si Liranosaurus es macho o hembra?
No, no hemos encontrado depósitos de hueso medular en las diáfisis  de los huesos largos estudiados, por lo qué no podemos saber qué  restos pertenecían a individuos machos y que estos pertenecerían a  hembras. Sí que hemos detectado cierto dimorfismo en los fémures  encontrados. Tal vez sea debido al dimorfismo sexual. A día de hoy  sólo se conseguido reconocer hembras en ejemplares de Tyrannosaurus y Tennontosaurus.

Estas son las preguntas que me he hecho yo. Si tenéis alguna más, preguntad.

Muchas gracias Julio.

La referencia del trabajo y otras sobre Liranosaurus:

Sanz, J.L., Powell, J.E., Le Loeuff, J., Martínez, R., Pereda-Suberbiola, X. 1999. Sauropod remains from the Upper Cretaceous of Laño (Northcentral Spain). Titanosaur phylogenetic relationships. Estudios del Museo de Ciencias Naturales de Alava, 14 (Núm. Espec. 1), 235-255.

Company, J. 2005. Longbone histology of Lirainosaurus astibiae (Sauropodomorpha: Titanosauria) from the Upper Campanian of Chera, Spain. Kaupia. Darmstädter Beiträge zur Naturgeschichte, 14, 75.  

Company, J., Pereda Suberbiola, X., Ruiz-Omeñaca, J.I. 2009. Nuevos restos fósiles del dinosaurio Lirainosaurus (Sauropoda, Titanosauria) en el Cretácico Superior (Campaniano-Maastrichtiano) de la Península Ibérica. Ameghiniana, 46, 2, 391-405.

Company, J. 2011. Bone histology of the tiranosaur Lirainosaurus astibiae (Dinosaurio, Sauropoda) from Latest Cretaceous of Spain. Naturwissenschaften, 98, 67-78.

Fotografía de Julio Company de una sección de un hueso de dinosaurio. 

lunes, 17 de enero de 2011

Frío, mucho frío.

Ya se para que vale el dichoso juguetito que venden en todas las tiendas de los museos de dinosaurios...

jueves, 13 de enero de 2011

Huellas de Niger

Hace poco me avisaron de que había una noticia sobre huellas de dinosaurio en la revista GEO (gracias moza). Os adjunto escaneado el texto en cuestión. Me gustaría que como hay gente que se dedica a las huellas y a dinosaurios que visitan el blog, la comenten. Para mi no tiene desperdicio y me crean muchas dudas filogenéticas.



 
Desconozco si escanear y poner aquí esta información es un delito. Si lo es, señores de la Revista GEO, perdonenme, pero realmente lo que es un delito es su noticia.

Noticia sacada de GEO 2011, nº 288, 18p

lunes, 10 de enero de 2011

Cuvier y la Venus hotentote

Polémica en Francia: ¿era Cuvier racista?

Tras el estreno en Francia de la película “Vénus Noire” en octubre de 2010, se ha generado una polémica centrada en la persona de Georges Cuvier (1769-1832). A pesar del prestigio que goza Cuvier como naturalista, al ser uno de los fundadores de la Paleontología como disciplina científica y el padre de la Anatomía Comparada, algunas voces críticas le acusan de racismo y proponen rebautizar la calle que lleva su nombre en París.

La película “Vénus Noire” de Abdellatif Kechiche cuenta la dramática historia de Sarah (o Saartjie) Baartman, más conocida con el sobrenombre de la “Venus hotentote”. Nacida en la región del Cap en el África austral, Sarah era una joven Khoisan (etnia que reúne a bosquimanos y hotentotes). Fue traída a Europa en 1810 por un colono Boer (neerlandés) ávido de fortuna y exhibida como un animal de feria en Inglaterra y Francia, donde se hizo famosa por su hipertrofia genital y el tamaño prodigioso de sus glúteos (macroninfia y esteatopigia en términos técnicos).

¿Qué papel jugó Georges Cuvier en esta historia? Tras su llegada a París en 1814, la “Venus hotentote” suscitó pronto la curiosidad. Tanto es así que inspiró un vodevil y se convirtió en un personaje en boga en los salones de la alta sociedad parisina. Los naturalistas también sintieron interés en conocerla. De hecho, Sarah Baartman fue llevada en marzo de 1815 al Museo de Historia Natural para ser examinada por un cenáculo de sabios, con Cuvier y Geoffroy Saint-Hilaire a la cabeza. Testimonio de su paso por el Jardín botánico son las acuarelas pintadas por varios artistas.

Sarah Baartman falleció prematuramente a finales de 1815. Cuvier se encargó de autopsiar y disecar el cadáver. Aunque no estaba autorizado a realizar este tipo de operación en el Museo, Cuvier pudo llevarla a cabo en virtud de una prerrogativa ligada al prestigio del que gozaba el organismo. La causa del fallecimiento pudo ser una neumonía agravada por una enfermedad venérea y el abuso de alcohol. Cuvier realizó un molde completo del cuerpo, antes de extraer el esqueleto y conservar en formol los órganos genitales y el cerebro. Violando una ley de 1813, el cuerpo de Sarah no fue inhumado. En 1817, Cuvier presentó un informe antropológico ante la Academia de Medicina. El molde en yeso del cuerpo y el esqueleto de Sarah Baartman fueron conservados en el Museo de Historia Natural, y expuestos posteriormente en el Museo del Hombre hasta 1976.

En 1994, tras el fin del apartheid, los jefes Khoisan pidieron a las autoridades francesas –por mediación de Nelson Mandela– la restitución del cuerpo de Sarah Baartman. En 2002 el Parlamento francés votó una ley para permitir el traslado de los restos de la “Venus hotentote” a Sudáfrica, donde fueron enterrados. La ceremonia fue un acontecimiento nacional, retransmitida por televisión y seguida por miles de personas. Según el informe presentado ante la Asamblea Nacional francesa, Sarah Baartman se ha convertido en el símbolo de la explotación sufrida por las etnias sudafricanas durante la colonización, y encarna la humillación soportada por las mujeres “generosamente dotadas” por la naturaleza.

El film de Kechiche es una mirada calidoscópica sobre la sociedad occidental de principios del siglo XIX y sobre su ideología racista, pero también una reflexión filosófica sobre el respeto y la dignidad humana. Cuvier se nos muestra como un personaje antipático, más preocupado por satisfacer su curiosidad científica sobre la anatomía de la “Venus hotentote” que por conocer la humanidad y triste destino de Sarah Baartman. Como ya hiciera Geoffroy-Saint Hilaire, Cuvier condenará en su informe a la “Venus hotentote” a la inferioridad racial.
 
Michel Alberganti, productor de un programa en la cadena de radio France Culture, se pregunta en su blog si está justificado conservar hoy en día una calle Cuvier, que le fue dedicada en 1838 por un decreto real, o incluso una calle Geoffroy Saint-Hilaire. Ambas calles están situadas en el distrito 5 de la capital parisina, delimitando al norte y al oeste el Jardín de las Plantas que alberga el Museo de Historia Natural. Los comentarios de Alberganti en Internet han suscitado numerosas reacciones, la mayoría de ellas contrarias a su singular propuesta. Él mismo reconoce que su objetivo es abrir un debate que nos lleve a reflexionar sobre la manera en que rendimos homenaje en nuestras calles a la memoria de científicos como Cuvier. Y que sin duda puede aplicarse a muchos otros personajes públicos (políticos, entre otros).

Para entender el pensamiento de Cuvier y otros naturalistas de su tiempo, debemos situarlos en su contexto histórico. Las concepciones científicas de aquella época estaban dictadas por la ideología dominante y claramente influidas por los prejuicios racistas. Juzgar a Cuvier y Geoffroy Saint-Hilaire únicamente por el episodio de la “Venus hotentote” y hacerlo además bajo nuestro modo de pensar moderno del siglo XXI, no sería hacer justicia a sus importantes contribuciones como hombres de ciencia.

Un último comentario. La polémica sobre Cuvier ha servido probablemente de promoción a la película “Vénus noire”. Dos meses y medio después de su estreno, sigue en cartel en las salas de cine.

Xabier Pereda Suberbiola
(corresponsal de El Vinosaurio en París)


Trailer e información sobre la película:  
http://venusnoire-lefilm.mk2.com/

Suplemento especial:  
http://www.franceculture.com/blog-en-quete-de-science-2010-11-01-venus-hottentote-une-rue-cuvier-a-paris-est-elle-opportune.html


Figura 1. Cartel de la película “Vénus noire” de Abdellatif Kechiche.

Figura 2. Caricatura de Sarah Baartman, la Venus hotentote (1810).

Figura 3. Retrato de Georges Cuvier.

Figura 4. La calle Cuvier y la fuente del mismo nombre en el distrito 5 de París. Foto tomada desde la calle Geoffroy Saint-Hilaire, junto a la entrada oeste del Jardín de las Plantas.

lunes, 3 de enero de 2011