viernes, 15 de junio de 2012

Lovecraft en las montañas de la locura I

En este relato, una expedición descubre extraños fósiles y las ruinas de una antigua civilización en la Antártida.

Ya no podía caber ninguna piadosa duda acerca de la naturaleza de los seres que habían construido y habitado aquella monstruosa ciudad muerta desde hacía millones de años, cuando los antepasados del hombre eran primitivos mamíferos arcaicos y los enormes dinosaurios vagaban por las estepas tropicales de Europa y Asia. *

                                                            En las montañas de la locura – H.P. Lovecraft

Figura 1
El pasado 15 de marzo de 2012 se cumplió el 75 aniversario del fallecimiento de Howard Phillips Lovecraft (1890-1937), escritor norteamericano que está considerado como uno de los principales exponentes de la literatura fantástica de terror del siglo XX. Autor autodidacta dotado de una gran imaginación, Lovecraft comenzó escribiendo poesía antes de dedicarse a la prosa fantástica. Su obra se compone de más de medio centenar de cuentos y relatos, publicados en su mayor parte en revistas populares. El horror de Dunwich, La sombra sobre Innsmouth, La llamada de Cthulhu y En las montañas de la locura son algunos de sus mejores relatos, escritos por Lovecraft en los últimos años de su corta vida.

Además de dedicarse a crear mundos oníricos poblados de seres maléficos, Lovecraft fue uno de los jefes de filas del periodismo aficionado en Estados Unidos. Jugó un papel importante en la organización social de los aficionados de la ciencia-ficción y en el impulso de las revistas pioneras de este género en la década de 1930. Su prematura desaparición le impidió ver cómo la ciencia-ficción se convertía en un movimiento literario reconocido.

Lovecraft se consideraba a sí mismo un caballero victoriano que cultivaba la literatura como un arte por su propio placer, sin preocuparse de las modas ni de los gustos sociales dominantes. Su actitud anticomercial y la escasez de recursos económicos le obligaron a ganarse la vida como corrector de estilo y escritor a sueldo para otros literatos menos talentuosos. A pesar de una respetable producción, murió en el anonimato más completo.

No obstante, la mitología lovecraftiana no desapareció con él. Una veintena de escritores, la mayoría de ellos amigos y admiradores del “Abuelo” (como Lovecraft se llamaba a sí mismo), contribuyeron a desarrollar y enriquecer su particular universo, lo que representa un caso especial en la historia de la literatura moderna. La obra de Lovecraft ha servido de inspiración a varias generaciones de escritores, pero también músicos, dibujantes de cómics, cinéfilos y otros amantes del género fantástico. 

Figura 2
Entre los relatos de Lovecraft, si hay uno que llama la atención del paleontólogo es En las montañas de la locura (At the Mountains of Madness en inglés). Lovecraft aborda en el mismo un “mundo perdido”, uno de sus temas favoritos. El narrador y principal protagonista es un geólogo de la (ficticia) Universidad de Miskatonic, en Massachussets. Escrito en primera persona, cuenta la historia de una expedición científica a la Antártida que descubre la existencia de una civilización desconocida. Al explorar una cordillera más alta que el Himalaya, un grupo de reconocimiento halla en una cueva los fósiles de unos seres extraños dotados de una cabeza pentarradiada, apéndices en forma de tentáculo y alas membranosas. Cuando el  narrador y otros expedicionarios llegan al campamento, sólo encuentran los cadáveres de sus compañeros. Varios de los supuestos fósiles han desaparecido. Más alla de las montañas, hallarán la respuesta al enigma: una gigantesca ciudad en ruinas que esconde a algunos de sus antiguos moradores. 

La novela está redactada en un estilo imparcial y objetivo, como si se tratara de un informe científico: la exploración del continente antártico, el descubrimiento de extraños fósiles, el hallazgo de una ciudad perdida, la presentación de la historia y cultura de una antigua civilización, etc. Abundan las referencias a los fósiles de épocas geológicas pasadas. Valga como muestra este ejemplo: Aquella fue la primera noticia que tuve del descubrimiento, y anunciaba la identificación de primitivas conchas, huesos de ganoideos y placodermos, restos de laberintodontes y tecodontos, fragmentos de cráneo de grandes mosasaurios, vértebras y placas de dinosaurios, dientes y huesos de alas de pterodáctilos, deyecciones de arqueoptérix, dientes de escualos del Mioceno, cráneos de aves primitivas, y cráneos, vértebras y otros huesos de mamíferos arcaicos tales como paleoterios, xifodontes, dinoceratas, eohippi, oreodontes y titanoterios.*

Una cita más: Arrastrados por las aguas desde desconocidas junglas de helechos arborescentes y hongos del mesozoico, desde selvas de cicadáceas, palmeras y primitivas angiospermas del triásico (se trata de un lapsus, ya que en otro pasaje se mencionan angiospermas del terciario), aquella miscelánea ósea contenía representantes de más especies animales del cretácico, el eoceno y de otros periodos de las que el más eminente paleontólogo habría podido contar o clasificar en un año. * Las descripciones de la fauna y flora del pasado están basadas en las ideas en boga en la época en que Lovecraft escribió la novela. Aunque algunas de ellas han quedado desfasadas, Lovecraft tuvo el acierto de mencionar la teoría de la “deriva continental” de Alfred Wegener, por entonces todavía minoritaria entre los geólogos, y de la que este año celebramos su centenario.

Continuará...


Xabier Pereda-Suberbiola


Bibliografía
Lovecraft H.P. (2011). En las montañas de la locura. Ediciones Cátedra, Letras populares, Madrid. Edición y traducción de Juan Antonio Molina Foix, 373 pp. Incluye anexos con una completa bibliografía.
Sprague de Camp L. (2002). Lovecraft. Una biografía. Valdemar, El Club Diógenes, Madrid, 1002 pp. (edición original en inglés).
Houellebecq M. (2006). H.P. Lovecraft: contra el mundo, contra la vida. Ediciones Siruela, Madrid (edición original en francés).

Páginas web en castellano con información sobre H.P. Lovecraft:


Figuras

Figura 1. Retrato de Howard Phillips Lovecraft (1890-1937) en su juventud.
Figura 2. Portada de En las montañas de la locura (Ediciones Cátedra, 2011). La ilustración es un detalle de la cubierta de la primera entrega del relato en la revista Astounding Stories, publicada en 1936. Los protagonistas huyen de un demoníaco shoggoth.

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